martes, julio 26, 2005

Viaje por Hidalgo. 1a parte

Hace unos días tuve un agradable viaje a Hidalgo y la verdad es que antes de irme, averiguando rutas y tips, me di cuenta que pocas personas han relatado su experiencia, por ello y tratando de rescatar al Universo en el que vivo, de este hueco de información, me daré a la tarea de platicar, en cuatro cómodos capítulos (bueno, según yo), cómo fué que transcurrió este viaje.(Juar!) Partimos un miércoles de Julio de la Central del Norte en el Distrito Federal, con el Señor Pez y otros tres conocidos, como a eso de las 5:00 PM En este lugar el boleto a Pachuca nos costó $44 pesotes, en Flecha Roja, aunque creo que casi en cualquier otra línea cuesta igual. Llegamos a la Capital del Estado como a las 6:30 PM, o sea que hicimos un tiempo récord, o por lo menos así me lo pareció. Estando en la Central de autobuses de Pachuca, tomamos una camioneta que cobró $4.50 y nos condujo hasta el Centro. Para localizar este punto, nos guíamos sobre todo por el Reloj Monumental, que se puede ver sobresaliendo por entre los edificios y las casas. Una vez que bajamos de la camioneta, caminamos por entre las calles siguiendo el Reloj para dar con la Plaza Central y la verdad es que, como las mochilas que traíamos, sobre todo yo, estaban un poco pesaditas, pues decidimos hospedarnos lo más pronto posible. Así que caminando dimos con "El Hotel de los Baños", que se ubica prácticamente a un costado de la Plaza del Centro. Los costos en el Hotel varían, pero una habitación doble, con TV, agua caliente, agradable y limpia por cierto, podían variar de $395 a $295. Dependía de la vista, de la ventilación, de los muebles y otros factores. Nosotros nos hospedamos en habitaciones con balcones a la calle principal (de $310), pero la verdad es que no fue muy agradable porque se traspasaba la luz del candil de la avenida por el ventanal, lo que resulta un poco molesto para algunos que somos medio vampiros, y pues, esa noche, ¡no pude dormir!! Bueno, pero al llegar, como ya era un poco tarde, salimos a caminar para conocer la zona. Caminamos y descubrimos entre otras, la calle Guerrero y ahí cenamos unas gorditas de frijol y de Chicharrón prensado deliciosas... y con un vaso de agua de limón (porque ya no había de otro sabor a esa hora, pero estaba rico)... La verdad es que me quedé con las ganas de probar los tacos de cabeza que vendía muy cerca de donde comimos garnachas, pero bueno, ya será en otra ocasión, porque al Pez no le gusta la comida con carne, aunque él dice que no es vegetariano. Caminando también, descubrimos la Iglesia de la Asunción, la Universidad de Hidalgo, en donde hay un Museo de Minerología, encontramos la Plazuela de la Independencia, etc., etc., etc., y me dí cuenta que había algunas rutas que podrían transportarnos a diversos lugares, desde ahí. Me di cuenta que los negocios los cierran como a las 8:30 PM o 9:00 aproximadamente. Y de plano, aunque quisiéramos seguir caminando, la verdad es que algunas calles ya estaban un poco oscuras y solas, como si de pronto hubiera desaparecido la gente. Ya circulaban pocos carros y después de tomarnos una fotos cerca del Reloj Monumental, (mismas que no he revelando) pues nos dirigimos al Hotel. Pachuca me dió la sensación esa tarde, de ser una mezcla de pueblo urbanizado, dándo la idea por momentos de ser un tanto caótico, pero a la vez resulta extremadamente bello y tranquilo comparándolo con el DF. Resultaba en esos momento intrigante saber en dónde me encontraba realmente. Aunque ya sabía que el lugar se llama Pachuca, sentía necesidad de decubrir más, de descifrar todo lo que me quería decir, por sus edificios, por su historia, por todos aquellos espacios en los que el tiempo y los hechos se han detenido para charlar con aquellos que se detengan a hacerlo... Este paseo comenzaba a ser altamente atractivo!

lunes, julio 18, 2005

Hola!

Hasta hace poco me dí cuenta que había desaparecido una liga muy importante a momentos bellos de mi existencia: Órbita 105.7 FM ha desaparecido...

Y es que ya lo sabía, pero, de pronto como que a uno no le llega la sangre al cerebro... Recuerdo que últimamente me había dado por pasar domingos nostálgicos en compañía de un programa de radio en el que leían poemas o fragmentos de textos literarios y despúes programaban música en español y en inglés, que la verdad era bastante buena y que generó algunos cassetes que son de mis favoritos. Antes de esta última versión, recuerdo que me desvelaba entre semana escuchando un programa llamado "La ciudad de los Dioses". ¡Cómo me fascinaba ese programa!

Bueno, pues desafortunadamente esos buenos tiempos no volverán... Bueno, en realidad no me he detenido a averiguar si la programación de la estación que ha quedado en su lugar es similar. ¡Y cómo olvidar los acústicos!

También recuerdo que entre mis locutores favoritos estaba Gerardo Vázquez y enloquecí la vez que en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, lo llegaron a invitar, para dar una conferencia sobre el movimiento del Rock en español. Por supuesto que estuve ahí y por supuesto que hubo otros invitados clave, pero de Órbita, definitivamente Don Gerardo Vázquez era emblemático.

Por supuesto que también me gustaban los programas de El Viajero, y de hecho creo que también alguna vez existió un programa denominado "El Piloto"

En fin, de pronto, por diversas cuestiones uno deja de escuchar ciertas estaciones, cierta música, hasta que llega otra alma que te recuerda que esa partecita del cuadrante también es parte de tí ("Tú eres lo que escuchas" ¿o no?) Bueno, pues ayer me acordé con mucha nostalgia de Órbita, gracias al Enrique Bunbury.

Y la verdad es que es lamentable que haya desaparecido, y creo que hay por ahí un huequito que debe ser llenado.

Ahora lo que me llama es una nueva estación, creo que se llama Horizonte 107.9 o algo así, programan música diversa, alternativa. Tienen buena programación. Me agrada bastante, sin embargo el espacio de Órbita, pues ahí sigue y seguirá.


Aunque creo que la fórmula que la originó, pues se transformó, junto con los cantantes y la música que se está produciendo, tal vez en parte eso la llevó a tener menores resultados, tal vez el presupuesto, porque era de Grupo IMER, no sé, no sé, pero, ¡ni hablar!

Qué se puede decir de tantas estaciones de radio que han formado parte de mi vida!!

Creo que el gran error de siempre es pensar que las cosas y la gente que uno ama o que significan algo en nuestra vida, siempre van a estar ahí, hasta que el tiempo y el devenir las arrasa de pronto o las transforma y hasta que tu cerebro reacciona y recuerda que existen y que necesitas alimentarte de lo que te puedan ofrecer, pero también de lo que necesitan de tí...

Saludos!

viernes, julio 08, 2005

De pronto uno a veces se llega a preguntar si alguien lo lee o visita este lugarcito...

¡No sean gachos!!!

Si alguien me visita en algún lugar de esta Tierra, por favor, ¡Mándenme un saludo!!! ¿no?

Bueno, aunque la creación de esta Bitácora personal, realmente tiene un propósito de catarsis y de práctica... pues pensaba que no estaría mal saber si alguien me ha visitado...

Medio traumada la niña, ¿no?